Foto: Laura Tenenbaum.
Sincero y frontal. Así podríamos definir a Walter Giardino, guitarrista de una de las bandas con más trayectoria del rock nacional, Rata Blanca, quien habló en exclusivo con DIARIO POPULAR y realizó un repaso de la historia de una de las bandas emblema del rock nacional.
La agrupación, que se encuentra presentando su nuevo discoTormenta Eléctrica (publicado en la primavera pasada) con recitales por diferentes países de América y en distintos puntos del conurbano (este sábado se presentarán en Lomas de Zamora en el Teatro Coliseo), posee un amplio repertorio de canciones gracias a sus casi tres décadas con la música, detalle no menor al momento del armado de la lista de temas para cada show.
"Al momento de armar el setlist tenemos titulares obligados que nunca van a poder salir y que la gente, pase lo que pase y tras escucharlos tantas veces, quieren seguir escuchándolos. Pero este disco nuevo nos está dando muchas alegrías. En vivo, prácticamente estamos tocando la mitad de las canciones y con gran aceptación de la gente. Tiene un espíritu muy joven. A la medida que voy tomando distancia de él, empiezo a ver lo que pasó y hacia donde lo dirigí. Ese espíritu joven lo veo reflejado en nuestro público más chico. Por ejemplo, la canción 'Los chicos quieren rock' es muy potente e ingenua en su filosofía, pero no deja de tener el espíritu rockero. Muchas veces en Argentina necesitamos las frases difíciles para parecer serios en nuestra poesía, pero esta es una banda de rock and roll. Al margen de que es una canción potente, y que en vivo la gente se divierte y salta, también tiene una connotación que sigue siendo la misma que siempre me interesó", resaltó.
En la recta final hacia los 30 años del primer recital de Rata Blanca (15 de agosto de 1987), Giardino rescata que la banda "nunca se esconde", ni "permite que el personaje se los coma".
Al respecto, el guitarrista agrega que "si uno es realmente lo que dice ser, hay ciertas cosas que tienen que ir a mayor. Cuando te contaminás demasiado podés empezar a perder esa magia. Eso lo hemos visto en varios casos lamentablemente en algunos artistas en Argentina, que sus propios personajes se lo comieron. Y ese personaje debe ser combatido, porque no puede ser más importante que nosotros mismos. Pero cuando vos dejas que ese personaje -que no es real pero que tiene éxito te domine- te estás traicionando a vos mismo. Y creo que eso es fundamental. Ese es uno de los ejes, de los pilares, para que tu energía siga intacta. Cuando vos te vendes, ganas por un lado, pero perdés mucho por el otro. Porque vos sabés que lo que estás haciendo no es lo correcto. Pero en mi caso, jamás traicioné lo que pensaba y voy en contra de lo que quieren escuchar. Siempre dije lo que pensé. Entonces eso se paga, pero prefiero pagar ese costo y no pagar el otro y poder seguir teniendo la energía intacta".
El éxito temprano y las consecuencias
"Surgimos del barrio de Bajo Flores en un ambiente muy picante, donde las drogas y las armas eran moneda corriente. Pero llegamos a pasar por el programa de Marcelo Tinelli y conocimos a un montón de personas: desde un presidente hasta Maradona, y nos empezamos a fascinar un poco con el lugar donde estábamos llegando. No te olvides que éramos pibes de barrio que salieron haciendo lo suyo y llegaron a lo más alto", recuerda Walter.
Cabe destacar que por la gran repercusión que les generó "El sueño de la gitana", "Mujer amante" y "La leyenda del hada y el mago", Rata Blanca debió abrir el circuito de escenarios para presentarse ante su público en lugares alternativos ante el cierre de varios teatros, lo que generó recelos dentro del ambiente musical.
"Nos castigaron por el éxito que tuvimos y eso vino de todos los sectores, pero desde el lado del heavy metal fue porque en este país el heavy nace desde el lado del resentimiento y el resentimiento nunca va a funcionar, nunca va a ser masivo porque es algo que aburre. No exageremos, que ese es uno de los problemas de este puto país. Se busca cómo ensuciar a las personas, en este caso a la banda. Rata es una banda que nunca se comió la de ninguno. Yo creo que somos una banda de rock metálico, si tenemos parte de heavy metal, pero no somos eso. Todos quieren algo, te quieren embanderar en algo que no era. Nosotros llegamos por nuestras canciones, no por ponernos una campera de cuero o no, o por hablar tonterías en televisión. Cuando nosotros fuimos a tocar a esos lugares, los llenábamos, los agotábamos. Llevamos el rock a la gente que quería escucharlo y no podía", asegura con orgullo y agrega que la agrupación pecó de inocente: "No teníamos en cuenta la envidia, la maldad, ni el clasismo. De que le habíamos pasado por arriba a Soda Stereo y a Charly García. Para nosotros era algo natural y hay gente que nunca no nos lo perdonó. Pero, ¿cómo lo podés evitar eso? Lo podíamos haber evitado quedándonos quietos, escondiéndonos".
Pero el análisis de Walter no comprende solamente el ambiente musical, sino que tiene una connotación que podría alcanzar también a la sociedad que lo rodea: "Es muy difícil encontrar gente real. Que realmente sea lo que muestra, y por eso Argentina está tan complicada. Acá los vende humo son los que mandan. Se tornó una sociedad muy vende humo y eso es lo que me llevó a irme del país para tomar al aire y volver al humo (risas). Todas estas incoherencias muchas veces hacen que sea todo muy difícil a veces armar algo desde el sentido común. Por eso en este país las cosas funcionan a bombazos. No se le roban los partidos a nadie. Acá se le roban los partidos a todo el mundo. Eso también hace que las cosas funcionen de esta manera. Por eso el negocio de la música no está bien, porque es cualquier cosa".
Laureles cosechados
"Está claro que Rata Blanca se ganó un lugar en la historia del rock nacional gracias a la fuerza de sus canciones, que mezclan el espíritu de los 80 y principios de los 90", manifiesta el artista en referencia a la trayectoria que los precede, y agrega que "Nosotros no somos una banda de camping, somos una banda de rock and roll, muy simple. En Argentina funciona más lo enroscado. Más básico y simple que los Rolling Stones no sé qué puede haber, y les dio resultado"
"¿Cómo creo que será recordada la banda? Rata Blanca ya quedó en la historia, no solamente en Argentina. Veo gente de otros países, que hablan otros idiomas y que cantan nuestras canciones en español. Hay algo con esta banda que está más allá. Nosotros tenemos amor puro por la música y la gente también elige. Rata va a seguir escribiendo su historia", concluyó.
Fuente : Sebastián La Mastra (@Sebalamastra)
diariopopular.com.ar
Gracias por compartir la nota. Saludos
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